miércoles, 14 de julio de 2010

Loca de patio en el antejardin


Podaba rápidamente las hojas de un arbusto mientras tarareaba una canción, sin querer hice un ruido y se volteó hacia mi. Me asusté, su giro fue rápido y amenazador, la tijera hacia reflejo con el sol y quise decir algo, pero no fui capaz, los ojos de ella eran raros. Dio una sonrisa diabólica y le respondí con una, no igual, la mía era con miedo, lanzó un carcajada y dijo: ¿Tan loca parezco? Pensé: ¿Le respondo que si? y sin querer dije lo que pensaba, se acercó lentamente, su tijera estaba muy afilada. Ella estaba muy cerca de mi, me intimidaba cada vez mas, su nariz casi chocaba con la mía, mi corazón daba latidos cada vez mas fuertes, sentía la tijera en mi cuello, ya imaginaba la sangre correr por el suelo. Se alejó rápidamente de mi y comenzó a llorar, no paraba, casi llegaba a los gritos, trate de calmarla y me empujó, caí encima de una planta que mi mamá adoraba y si querer la dañe, ella río con malicia, aun con lagrimas en sus ojos, me indicó con su tijera y con una rapidez impresionante cortó su cabeza la cual cayó al suelo. No recuerdo mas, desperté mas tarde con la tijera en mi velador. Mi mamá contrató a otra persona. Ahora arregla el jardín. La planta de mi mamá crecio tan bella como antes.

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